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El terror 2 |
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LA SÉPTIMA ETAPA
Edgar Allan Poe
En la séptima etapa no hubo ningún programa dedicado al terror, pero sí a la figura de unos de los escritores preferidos de Chicho Ibáñez Serrador e inspirador de muchos de sus capítulos de «Historias para no dormir»; nos referimos a Edgar Allan Poe, sobre quien giró la emisión del 6 de noviembre de 1991.
Tanto Miriam Díaz-Aroca como las azafatas compartieron vestuario: unos largos trajes propios de la primera mitad del siglo XIX.
Sus “Narraciones extraordinarias” y la trágica vida del autor con sus delirium tremens centraron el desarrollo de la subasta. Como curiosidad podemos decir que el playback del número musical de este programa volvió a utilizarse en la emisión del 27 de febrero de 2004, que estuvo dedicado precisamente a “Narraciones extraordinarias”.
LA OCTAVA ETAPA
Las Navidades del Conde Drácula
En la octava etapa se hizo algo que nunca antes se había hecho en la historia del «Un, dos, tres...»: y fue mezclar el tema del terror con las fiestas navideñas y los niños. En efecto, hasta entonces en Navidad se solían hacer programas especiales con público y concursantes infantiles, y en la subasta solían aparecer personajes típicos de la Navidad, como los Reyes Magos, Papá Noel, etc.
Pero en el programa del 25 de diciembre de 1992 Chicho quiso darle una vuelta de tuerca al terror e innovar titulando el programa “Las Navidades del Conde Drácula”.
Como solía ocurrir en los programas infantiles, Jordi Estadella y Miriam Díaz-Aroca se intercambiaron los papeles, de modo que Jordi fue el contable y el presentador de la eliminatoria, mientras que Miriam hizo las preguntas a los concursantes y condujo la subasta, ataviada de “Draculina”.
Como anécdota podemos destacar que en este programa intervino como artista invitado, caracterizado de Drácula, Javier Gurruchaga y la Orquesta Mondragón; una de las chicas del coro era Jenny Hill, que había sido azafata en la sexta etapa de «Un, dos, tres...».
Jenny con Mayra Gómez
Kemp en el set de contables en una foto tomada
En el número musical de la subasta las azafatas, caracterizadas de vampiresas, se lamentan de que ya no causan pavor entre la chiquillería.
En este vídeo vemos este número musical:
El esoterismo
Algunas semanas más tarde, el 5 de febrero de 1993, el programa estuvo dedicado al esoterismo, y comenzó con un primer plano de los ojos de José Elías y la voz en off de Narciso Ibáñez Menta, que decía esto:
Están ustedes viendo a José Elías, Licenciado en Psicología por la Universidad de Barcelona, Máster en Psicología Superior en Estados Unidos, Director de la Escuela de Psicología de Madrid. Este hombre convivió largo tiempo con los Lamas en el Tibet; domina la mente y ahora está tratando de hacerles llegar un mensaje. Si permanecen en silencio y concentra en su atención en su mirada, tal vez ese mensaje pueda llegar hasta ustedes.
El primer plano de los ojos fue emitido en diversas ocasiones durante todo el programa, con el objeto de que los espectadores lograran adivinar el personaje que estaba tratando de transmitir por telepatía, del que dieron como pista que era mundialmente conocido y que podría tratarse de un deportista, de un artista o de un político. Al comienzo del programa siguiente, Jordi Estadella anunció que muchos espectadores habían conseguido adivinar que el personaje que el telépata intentaba transmitir a través de su pensamiento y su mirada era Sadam Husein.
En este programa dedicado al esoterismo, tanto las azafatas como “las Derrochonas” (las hermanas Hurtado) aparecieron vestidas de brujas.
En la eliminatoria se utilizó una prueba clásica cuya mecánica ya se había usado en otras ocasiones: los concursantes debían cruzar a través de unos ejes giratorios que simulaban ser el palo de una escoba de bruja, hasta llegar al extremo y conseguir un murciélago que había en la zona de las fibras de mijo. Ninguna de las dos parejas lo consiguió, así que se declaró un empate.
En este vídeo vemos cómo resolvió el empate Chicho Ibáñez Serrador:
El programa contó con la presencia del ya fallecido profesor Germán de Argumosa, que es considerado como el introductor de la parapsicología en España.
Rául Sénder interpretó nuevamente al vidente e hipnotizador del programa dedicado a las ciencias ocultas (17 de diciembre de 1982), pero en esta ocasión acompañado de Mari Puri (Fedra Lorente). Con un mensaje sobreimpreso en la pantalla, Chicho indicó a los espectadores que el sketch era un homenaje al payaso Rámper, creador del número.
Como en 1982, también le hicieron una carta astral al «Un, dos, tres...»; en este caso fue Michele de Notre Dame, que vaticinó una larga vida y mucho éxito, con grandes ingresos de dinero, aunque también muchos gastos; también indicó que podría haber peligro de fuego o cortocircuito y que una mujer que trabaja en el programa provocará alguna dificultad o problema.
En este programa no podía faltar la intervención del mentalista Anthony Blake, que, como siempre, sorprendió a todos los espectadores, pero, esta vez, especialmente a Loli, la concursante.
Los concursantes decidieron arriesgarse con el juego final para poder ganar dinero, que era más fácil de dividir entre las dos parejas. Adivinando cartas llegaron a acumular 6.500.000 pesetas, y Jordi Estadella les dio la oportunidad de doblar la cantidad o perderlo todo; los concursantes afianzaron la cantidad obtenida, que fue también la que ganaron los sufridores de Gallina Blanca.
De esta forma tan inquietante anunciaron el programa en la prensa:
El Más Allá
El penúltimo programa de la octava etapa estuvo dedicado al Más Allá (2 de julio de 1993) y comenzó con la bajada por las escaleras de unos zombies que atemorizaron a las personas del público. La escena termina con una magnífica versión del “Thriller” de Michael Jackson, precedida de un texto leído en off por Narciso Ibáñez Menta.
En este vídeo vemos el comienzo de este programa:
En la eliminatoria, los concursantes tenían que cruzar una pasarela tratando de evitar a los espíritus, que no eran otra cosa que unos obstáculos de plástico que unos miembros del público hacían balancear para hacer caer a los concursantes. Como curiosidad, gracias a esta eliminatoria pudimos conocer cómo eran todas las puertas laterales del plató en esta etapa. Y tal y como ocurrió en el programa dedicado al esoterismo, en esta eliminatoria también se produjo un empate, por lo que Chicho decidió mezclar a ambas parejas para que compartieran el premio de la subasta y del juego de consolación.
En el juego de PANRICO y BOLLYCAO participaron
Este programa destacan especialmente por sus espectaculares números musicales introducidos por la voz en off de Narciso Ibáñez Menta; además del “Thriller” con el que se abría el programa, la subasta comenzó con uno en el que Alejandra Cano conducía a un guerrero musulmán (Alejandro Balagueró) al Más Allá, compuesto por un harem de odaliscas formado por el resto de azafatas y bailarinas; y terminaba con uno muy divertido protagonizado por Mayte Navarrete, que se lamentaba de ser budista porque después de cada muerte tiene que volver a reencarnarse una y otra vez. Como curiosidad, se puede destacar que este número gustó tanto al público y al equipo que se volvió a emitir en el programa dedicado al lejano Oriente de la siguiente etapa (25 de enero de 1994).
En este vídeo vemos este número musical:
LA NOVENA ETAPA
Frankenstein
En la novena etapa hubo un programa dedicado a Frankenstein (4 de marzo de 1994). La propia calabaza Ruperta, en los dibujos, adoptó un aspecto realmente terrorífico.
Al comienzo del programa las azafatas aparecieron vestidas como en el programa dedicado al terror de la sexta etapa, pero en la subasta pasaron a llevar unos trajes blancos de doncellas virginales.
El programa fue una sucesión de vísceras y huesos, que sufrieron tanto los concursantes como el público: los concursantes, porque durante la eliminatoria tenían que encontrar huesos y órganos dentro de un recipiente para llenar el cuerpo de Frankenstein.
Y el público, porque recibieron sobre sus cabezas toda clase de tripas lanzadas por unas chicas desde la escalera central del plató.
La artista invitada en esta ocasión fue la sensual Marlene Mourreau, que nos deleitó con una sugerente coreografía que terminaba con un striptease; en el número le acompañaron los chicos y chicas del ballet del programa.
La voz en off de Narciso Ibáñez Menta no podía faltar tampoco en este programa, precediendo la actuación de Marlene Mourreau.
En este vídeo vemos esta actuación, que concluyó con un sorprendente final:
Del plantel de cómicos del programa, quien en este programa se disfrazó del monstruo de Frankenstein fue Pepe Viyuela.
LA DÉCIMA ETAPA
“Drácula”
En «Un, dos, tres... ¡a leer esta vez!» hubo tres programas que estuvieron dedicados a novelas del género de terror.
La primera fue “Drácula” (16 de enero de 2004). Para la ocasión se construyó un decorado que simulaba ser el castillo del Conde, con una escalera en el centro y la cripta donde se encontraba el ataúd en un lateral.
Como curiosidad podemos señalar que la Ruperta que apareció en este segundo programa se conserva actualmente en las oficinas que PROINTEL, la productora de Chicho, tiene en Madrid, y ha viajado en varias ocasiones cada vez que se expone “Historias para no olvidar”.
“Narraciones extraordinarias”
El 27 de febrero de 2004 se emitió el programa dedicado a “Narraciones extraordinarias” de Edgar Allan Poe. Los monstruos que generaba la mente del escritor estadounidense en sus delirium tremens fueron los protagonistas del programa, en una excelente caracterización del grupo de teatro “Ale Hop”. Por su parte, el actor Javier Sáenz fue quien dio vida a Allan Poe.
Por lo demás, como ya señalábamos anteriormente, en el programa se utilizó el mismo playback del número musical del programa de la séptima etapa.
En este vídeo vemos el espectacular número musical, titulado “La taberna del delirio”:
“Frankenstein”
La tercera novela dentro de este género de terror fue “Frankenstein”, a la que estuvo dedicada el programa emitido el 2 de abril de 2004.
A pesar de la temática, el programa estuvo orientado sobre todo al humor con la presencia desde el comienzo del actor Javier Sáenz en el papel de “Igor”, acompañando a Chicho Ibáñez Serrador y Luis Roderas en un sketch inicial en el que se simulaba la creación del monstruo.
En este vídeo vemos a un particular Chicho Ibáñez “Serrastein” dando vida al monstruo de Luis Roderas...
El personaje de “Igor” continuó durante todo el programa, acompañando a las chicas azafatas en el set de las azafatas contables al principio, y ayudando a Luis Roderas durante el desarrollo de toda la subasta después.
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