Amparo Marzal Martínez y
Antonio Puig Renau, matrimonio y
residentes en Cartagena, forman una de las parejas de concursantes de
«Un, dos, tres...» más recordadas por el equipo del
programa y por los espectadores.
Se da la circunstancia de que participaron siendo
presentadores tanto Kiko Ledgard como Mayra Gómez Kemp.
Participación en la segunda etapa de
«Un, dos, tres... responda otra vez»
En efecto, la primera vez que Amparo y Antonio
concursaron en «Un, dos, tres... responda otra vez» fue en la segunda
etapa, concretamente, en el programa dedicado al cine (1 de abril de
1977), en el que no consiguieron ser campeones en la tanda de preguntas,
pero tampoco ganar la eliminatoria para poder pasar a la subasta.
En cambio, en el juego de consolación de
“La Ruperta
fantasma” consiguieron encontrar la casilla que la escondía (la C-10),
ganando el bote acumulado de 375.000 pesetas.
Campeones durante cinco semanas consecutivas
Cuando el «Un, dos, tres...» regresó en 1982, ya con Mayra Gómez Kemp
como presentadora, para el primer programa, dedicado a
“Las mil y una noches” (20 de agosto de 1982), se eligieron parejas de
concursantes que ya habían participado en la etapa anterior y que habían
resaltado por su simpatía.
Una de ellas fue la formada por
Amparo Marzal Martínez y Antonio Puig
Renau, que
nos la presentó Irene Foster, ocupando el podio número uno. La pareja
número dos estaba formada por Lucía Madrigal Sardor y Pedro Gomariz
Granja, y la tercera pareja
por Inmaculada González Iznaola y Jesús Jiménez Cubells.
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Puedes ver completo
el programa dedicado a
“Las
mil y una noches”
haciendo clic en el televisor
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En aquel programa consiguieron superar a sus dos parejas
contrincantes y alzarse con el título de campeones, lo que les permitía
concursar nuevamente la semana siguiente, en el programa dedicado a las
novelas famosas (27 de agosto de 1982).
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Puedes ver completo
el programa dedicado a las
novelas famosas
haciendo clic en el televisor
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Amparo y Antonio consiguieron revalidar el título de
campeones durante varias semanas consecutivas, y así participaron en los
programas dedicados a la Edad Media (3 de septiembre de 1982), los
cuentos infantiles (10 de septiembre de 1982), el infierno (17 de
septiembre de 1982) y Las Vegas (24 de septiembre de 1982).

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Mayra Gómez Kemp les formula la primera pregunta
en el programa dedicado a los cuentos infantiles |
El programa dedicado a Las Vegas
En el programa dedicado a Las Vegas (24 de septiembre de 1982), Amparo y
Antonio se enfrentaron a Pilar Mingo Rodríguez y Emilio Varela Peña,
amigos y residentes en Madrid, y a Sorania Pueyo y Daniel Vega, amigos y
residentes en Barakaldo.

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En el programa dedicado a Las Vegas fueron despojados de sus bandas de
campeones |
El resultado de la tanda de preguntas de este programa
fue el siguiente:
Primera tanda de
preguntas |
Primera
pareja |
Segunda
pareja |
Campeones |
175 |
400 |
500 |
Segunda
tanda de preguntas |
Primera
pareja |
Segunda
pareja |
Campeones |
1.750 |
5.600 |
5.000 |
Tercera
tanda de preguntas |
Primera
pareja |
Segunda
pareja |
Campeones |
7.000 |
67.200 |
15.000 |
A pesar de que la pareja número dos y los campeones llegaron muy
igualados a la tercera pregunta, el número de respuestas que dieron
Soraina y Daniel fue tan elevado que consiguieron arrebatarles el título
de campeones.
Lógicamente, al no haber podido repetir como campeones, Amparo y Antonio
tuvieron que someterse a la prueba eliminatoria,
enfrentándose a la pareja formada por Emilio y Pilar.
En aquella ocasión consistió en aguantar el mayor tiempo
posible subidos a un toro mecánico. La prueba debían realizarla ambos
miembros de cada pareja, sumándose los tiempos que cada uno de ellos
consiguiera mantenerse encima del toro. Emilio consiguió estar 33
segundos sin caerse; Antonio, por su parte, aguantó durante 41 segundos;
Pilar se cayó del toro en el segundo 28; y Amparo, que con tan sólo 21
segundos, ganaría la eliminatoria, consiguió estar encima mucho tiempo
más; en total, 30, por lo que Amparo y Antonio consiguieron ganar el
pase a la subasta.

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Amparo demostró tener gran habilidad subida al toro mecánico |
Durante la subasta Amparo y Antonio dejaron pasar
regalos buenos, como 500.000 pesetas en oro, pero también regalos malos,
como la calabaza Ruperta, un flamenco o quinientas fichas de teléfono. Además,
“Martes y 13”, caracterizados de “conejitas de Playboy crupier”, les
ofrecieron un juego paralelo durante todo el programa, que iba a
acumulando dinero, pero sin saber la cantidad final. Mayra les ofreció
cambiar su regalo por esa cantidad secreta, pero decidieron quedarse con
el regalo y dejar las 400.000 pesetas que habían acumulado con el juego
de “Martes y 13”. Al final, el premio con el que consiguieron quedarse
fue un fantástico Seat Ronda Crono.
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Puedes ver completo
el programa dedicado
a Las Vegas
haciendo clic en el televisor
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Los recuerdos de Amparo y Antonio
El 11 de enero de 2018, en el programa «¿Dónde estabas entonces?»
dedicado a 1982 (#DondeEstabas82),
Amparo y Antonio fueron entrevistados y contaron sus recuerdos sobre su
participación en «Un, dos, tres...».
Amparo declaró que decidieron escribir para concursar en el programa
porque se divertían mucho viéndolo en casa; cuando lo hicieron por
primera vez en 1977, Antonio estaba haciendo la “mili” y en uno de los
permisos, al volver a casa, decidieron escribir una carta para
postularse como concursantes y resultaron elegidos.
También contaron que, posteriormente, fueron llamados para participar en
el primer programa de la nueva etapa de «Un, dos, tres...», ya
presentada por Mayra Gómez Kemp, y consiguieron ser campeones hasta el
sexto programa.
Recordaron que la eliminatoria tuvieron que repetirla porque, aunque
habían ganado en la primera ocasión, la otra pareja insinuó que habían
sido beneficiados por el hecho de ser la pareja que llevaba como
campeona seis semanas. Chicho Ibáñez Serrador, para evitar cualquier
sospecha de favoritismo, decidió que las parejas se enfrentaran
nuevamente al toro mecánico y Amparo y Antonio volvieron a ganar.

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Recordaron que en la subasta, cuando se enfrentaban a los dos últimos
regalos de la noche, había en la mesa un petardo y las plumas de una
vedette, traídas del número de la apoteosis final. A Antonio lo del
petardo le olía mal y hubiera preferido las plumas, pero fue Amparo la
que tuvo la intuición de que éstas podían esconder un montón de pavos, y
ellos no estaban preparados para montar una granja; y no andaba muy
desencaminada la concursante, porque la tarjetita de las plumas escondía
un camión lleno de gallinas. En cambio, el petardo escondía en su
interior el encendedor de un modernísimo Seat Ronda Crono de color rojo
y aspecto deportivo, que —como declaraba el propio Antonio— era uno de
los premios más codiciados por los concursantes de «Un, dos, tres...».
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